Acostumbramos escuchar frases como “té de menta” o “té de durazno”. Pero quienes conocemos la definición completa de la palabra “té” en seguida nos apresuramos a corregir.

El té amarillo o Huáng Chá (黄茶) en chino, también conocido como té dorado, es un tipo de té muy especial. Esto es porque solo existe un puñado de variedades de esta familia, que se producen exclusivamente en China.

El Ju Pu Cha (橘普茶), literalmente “puerh en mandarina”, consiste en una mandarina o toronja rellena de puerh cocido. Se trata de una maravilla del mundo del té que ha existido por cientos de años en China.

Te queremos dejar algunas de nuestras recetas de té frío para mantenerte hidratado durante los meses de calor. Aunque el agua es el mejor aliado en estos casos, a veces queremos probar algo distinto.

Uno de los legados más sabrosos de la Inglaterra imperial es sin dudas el Earl grey. Un blend (una mezcla) en base a té negro que se ha convertido en un clásico y cuya historia es casi tan rica como su infusión.

El blue matcha se ha posicionado como una excelente opción para lograr tonalidades azules y violáceas; como es el caso del ube, un tubérculo filipino que se utiliza para teñir postres.

Perfil sensorial: famoso por sus brotes dorados (como su nombre lo indica), este té de cuerpo liviano a medio y sabor complejo se caracteriza por evocar notas dulces como cacao, vainilla, damascos, zanahorias acarameladas y batata (boniato) al horno.

El Pouchong o Paochong es un té semioxidado elaborado en la zona de Wenshan, al norte de Taiwán. Pertenece a la categoría de los oolongs, aunque por su importancia, podríamos considerarlo toda una categoría de tés.